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Virgen de la Amargura

Rompiendo mi promesa de no volverte a verte ni en pintura, me he sentado a tu mesa, Virgen de la Amargura a jugarme a los dados nuestra suerte, a absolverte de todos mis pecados.
Bendigo la condena, al sĆ³lo de tu bordĆ³n que me hace fuerte y beso tus cadenas y quiero prometerte ser libres como dos versos tachados del dictado de la revoluciĆ³n.
Me acuso de morirte sin tu boca, confieso que desde que te has marchado solo bailo en las fiestas donde tocan la musica del vals de los ahorcados.
Virgen de la Amarguara, devuƩlveme la vida, sin tƭ todo es usura y noches perdidas. Facturas, calenturas, heridas sin sutura, caƭdas, congeturas, sacudidas, cerraduras
despedidas de locura y callejĆ³n.
La guerra ha terminado, yo vengo a arrodillarme ante tu cama. Te rezan mil soldados
y el palacio estĆ” en llamas, tu general arrĆ­a mis banderas, las fieras entran en la catedral.
El rey muriĆ³ en el campo de batalla, la reina se ha pasado al enemigo, yo no me cuelgo mĆ”s que la medalla de no saber contar menos contigo.
Virgen de la Amarguara, devuƩlveme la vida, sin tƭ todo es usura y noches perdidas. Facturas, calenturas, heridas sin sutura, caƭdas, congeturas, sacudidas, cerraduras
despedidas de locura y callejĆ³n.
Te vas y no te vas y cuando vienes rezo para que los trenes se equivoquen de estaciĆ³n.
Virgen de la Amargura…

Virgen de la Amargura
JoaquĆ­n Sabina
Vinagre y Rosas (2009)

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